Pandemia por COVID-19 triplica morosidad en el sector habitacional

Entre 5% y el 15% ha aumentado la morosidad en el pago de alquileres de pisos y casas en España.

Las cifras son aportadas por la Asociación de Propietarios de Vivienda en Alquiler (ASVAL), quienes además solicitan la creación de un fondo económico que ayude a paliar la dura situación por la que están atravesando cerca de 350.000 familias.

Este aumento en el incumplimiento de pagos de alquileres, se ha disparado como consecuencia de la cuarentena por la aparición del COVID-19.

La patronal de arrendadores expresó que la creación de un fondo para ayudar a las familias que están en condición de riesgo, debería estar fijado en al menos 700 millones de euros, para ayudar a cerca de 350 mil familias, ya que la situación podrá ir en aumento en los próximos meses.

De acuerdo con un comunicado emitido por la ASVAL, el retraso de los pagos de alquileres se ha ido presentando de manera progresiva desde el inicio de la pandemia.

Comenzó con un porcentaje de familias en mora de 5%, mientras que en estos seis meses de pandemia ha llegado al 15%.

Los representantes de ASVAL indicaron que de no tomarse las medidas correspondientes, esta cifra seguirá aumentando gradualmente.

Voceros de este ente aseguraron que las medidas que se vienen aplicando hasta ahora no ha sido suficiente, por lo que solicitan medidas más contundentes, como es el caso de la creación del fondo que han solicitado.

Los representantes de esta organización también indicaron con respecto a las medidas que están en marcha que “no están siendo efectivas para paliar las dificultades de los inquilinos más vulnerables en el pago del alquiler”.

Igualmente, el comunicado asegura que el incumplimiento de los pagos correspondientes a los alquileres está afectando a “millones de propietarios particulares”.

ASVAL ofrece cifras preocupantes

Beatriz Toribio, directora general de la Asociación de Propietarios de Vivienda en Alquiler expresó que solo el 1,3% de los arrendatarios de las viviendas y pisos que forman parte de ASVAL, han solicitado préstamos con garantía pública a fin de hacer frente a esta situación.

Esta falta de interés en el pago de los arrendamientos caídos, por parte de los inquilinos “confirma la escasa utilidad que está teniendo esta medida entre las familias con mayores dificultades económicas”.

Así mismo, Toribio aseguró que las ayudas directas que ofrecen las comunidades autónomas, dirigidas al pago de arrendamientos, cuentan con un presupuesto limitado e insuficiente, esto como consecuencia del gran número de familias que las solicitan.

Dichos préstamos son el eje de los programas sociales que se han activado para ayudar a personas con los pagos en los que se han retrasado desde el inicio de la pandemia.

Están enmarcadas a ayudar a pequeños arrendadores, que cuenten con 10 o menos viviendas, quienes no están obligados a rebajar los precios en un 50%, como es el caso de las grandes inmobiliarias.

Estas medidas son las que han venido afectando de manera directa a los propietarios particulares, y a quienes se pretende reivindicar con las medidas propuestas por la asociación.

En razón de esta deficiencia a nivel presupuestario, ASVAL hizo la solicitud para la creación del fondo económico que pueda permitir que más familias puedan acceder a esta ayuda.

De acuerdo con las cifras planteadas por Toribio, dicho fondo propuesto por la institución que precede, podría estar reduciendo la tasa de esfuerzo que supone el pago del alquiler entre 48 y 30% de los ingresos mensuales.

Esta disminución en el esfuerzo del pago del alquiler, podría estar sujeto a una ayuda pública, pautada en dos mil euros anuales para cada grupo familiar.

ASVAL pide soluciones eficientes

Si bien la ASVAL hizo la solicitud de un fondo económico, están conscientes de que esta medida tampoco es la única que se requiere para mejorar los índices de incumplimiento en materia de pago de rentas y alquileres.

Por tal motivo, los representantes de esta asociación piden además un aumento en el ámbito de seguridad jurídica con respecto a la ocupación, además de diseñar planes orientados al control sobre los precios de los alquileres de viviendas.

Para Toribio, el control de los precios de alquileres de viviendas no representa la solución que requieren en las dificultades que presenta el mercado de alquileres, ya que para ella lo que se necesita es aumentar la demanda, y no contraerla.