El incendio en Gijón registrado en la parroquia de Monteana y San Andrés de los Tacones dejó una noche difícil de olvidar. Las llamas, avivadas por fuertes rachas de viento, obligaron a evacuar decenas de viviendas y mantuvieron en vilo a más de medio centenar de vecinos.
Aún con el amanecer, el olor a humo y madera quemada continuaba impregnando el aire, recordando la tensión vivida durante horas de incertidumbre. Las llamas comenzaron en el monte Areo, una zona boscosa que marca el límite entre Gijón y Carreño.
Lo que parecía un fuego controlado días atrás, se reavivó de forma inesperada, provocando un despliegue de emergencia sin precedentes. Bomberos, Guardia Civil, Cruz Roja y Protección Civil trabajaron de manera coordinada durante la madrugada para proteger tanto a los habitantes como a sus animales.
| Descubre: Así es el calendario laboral en Madrid 2025 | Fechas inéditas |
Una evacuación inesperada y un refugio improvisado
Cuando la Policía Local alertó del peligro, muchos vecinos apenas estaban terminando de cenar. Algunos salieron sin poder recoger documentos o ropa, mientras que otros no quisieron abandonar a sus mascotas, trasladándolas consigo en plena noche.
Ante la emergencia, el colegio de Monteana se convirtió en un refugio improvisado donde se repartieron mantas, sacos de dormir y colchones para las familias afectadas.
La alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, se presentó en el lugar para acompañar a los vecinos y supervisar el operativo. Su presencia ayudó a tranquilizar los ánimos en medio de la tensión, mientras las unidades de emergencia trabajaban para contener el fuego.
|
Usa el comparador de seguros de alquiler de viviendas y consigue la póliza más competitiva en el mercado. |
¿Qué causó el incendio en Gijón?
Las primeras hipótesis apuntan a que las fuertes rachas de viento, de hasta 50 km/h, reavivaron brasas de un incendio anterior en la misma zona.
Sin embargo, algunos residentes no descartan que el fuego haya sido intencionado, ya que se habían detectado conatos de incendio días antes. Las autoridades aún investigan las causas, pero los vecinos piden mayor mantenimiento de los caminos y zonas forestales para evitar situaciones similares.
Solidaridad y apoyo vecinal durante la emergencia
Durante el incendio en Gijón, la comunidad mostró una solidaridad ejemplar. Vecinos ayudando a trasladar animales, compartiendo café y mantas o acompañando a personas mayores fueron escenas recurrentes.
Incluso algunos jóvenes se quedaron toda la noche colaborando con los bomberos y las fuerzas de seguridad. La Cruz Roja también tuvo un papel fundamental, distribuyendo comida, agua y asistencia a los afectados. Gracias a la lluvia caída en la madrugada y a la mejora del viento, el fuego pudo controlarse a primera hora del jueves, permitiendo el retorno de los evacuados a sus hogares.
Impacto emocional y aprendizajes tras el incendio
El incendio en Gijón dejó huella, sobre todo en los más pequeños. Muchos niños relataron el miedo que sintieron al escuchar las sirenas o ver el cielo teñido de rojo.
No obstante, la rápida actuación de los equipos de emergencia evitó daños personales graves. El suceso ha reabierto el debate sobre la prevención de incendios forestales y la necesidad de reforzar la coordinación ante episodios climáticos adversos.
¿El seguro de alquiler de viviendas cubre incendios?
Una de las preocupaciones que surgen tras eventos como el incendio en Gijón es si los seguros de alquiler ofrecen protección ante estos siniestros. En la mayoría de los casos, los seguros de hogar o de arrendamiento sí cubren los daños por incendio, tanto estructurales como en el mobiliario, siempre que se encuentren incluidos en la póliza.
Sin embargo, es importante revisar las cláusulas, ya que algunas compañías limitan la cobertura si el fuego se origina fuera de la vivienda o por negligencia.




Hola Jose, no existe un seguro de impago por habitaciones.